Era un hombre épico
con un rostro angélico,
de una voz poética
y mucho tesón.
Un diplomático
y muy dinámico
también simpático
vaya guapetón.
Era modélico
y fotográfico,
con mucha táctica
se me aproximó.
Y allí tan próximo
y con mucho ánimo
le dije al prójimo
que se terminó.
Muy bien, Jessica, cumple tu poema todos los requisitos.
ResponderEliminarEso sí, me queda la duda de si se terminó se refiere al prójimo porque te vas con el hombre épico o si te refieres a que le diste calabazas...